miércoles, 28 de septiembre de 2011

Mi primera semana en Londres...


Bueno bueno... tanto hablar y mi primera semana en Londres ya es historia.

La verdad es que cuando me vine por primera vez, hace ya un año, lo hice con una idea diferente a la que al final me llevé. Pensé que me encontraría con una ciudad oscura, ruidosa, llena de rascacielos, caótica y de gente antipática. Y la verdad, si por algo he venido es porque la buena impresión que me dio al venir, me enamoró. Y aquí estoy, intentando sobrevivir a esta jungla llamada metrópoli con todo tipo de especies humanas -excepto de londinenses-.

El otro día, tomándome un te en el Starbucks de Coventry St. empecé a ver un mogollón de gente disfrazada de héroes -como spiderman, batman...- gritando y que entraron en un centro comercial. ¿sabeis que respuesta me vino a la cabeza en ese preciso instante? Estoy es Londres!.

Pues eso, una ciudad que combina la modernidad de sus edificios, la combinación de culturas y razas, con la antigüedad -y algo arcaico- de su Underground. Me quedé alucinado cuando vi que no tienen el metro adaptado para personas con alguna discapacidad física. Más aún cuando tienen unos Juegos Olímpicos y Paralímpicos a la vuelta de la esquina. A ver como lo hacen...ya os contaré.

Y bien, digamos que soy un chico con suerte. No todo el mundo puede decir que al tercer día de llegar encuentre trabajo y lugar dónde vivir, yo sí. Respecto al trabajo, tengo que agradecer al diari Menorca por la sección "menorquins al món" porque fue gracias a él que agregué a Pau Sans Bassa y gracias a Pau ahora tengo trabajo en Costa Coffee. Y respecto a la casa, eso fue un pim pam pum, ya que por mucho que estuviese mirando desde España, hasta que no estás aquí en vivo es muy difícil encontrar un lugar dónde vivir. Ya os digo, quizás fue suerte pero fue mi segundo sitio dónde fui y me lo quedé. Eso si, cerquita del trabajo ( 20 min en bus, 10 min en tren) y listo.

Y bien, después de eso, me faltaba la cuenta bancaria y la national ensurance. Lo primero, no tuve problemas en hacérmelo (al contrario de mucha gente que ha tenido pegas en abrirse una). Creo que sobre esto es tener suerte de dónde vas y con quién te encuentres delante. Probé en tres sucursales y en la cuarta (de la misma compañía), sin esperas ni citas, me cogieron y me lo hicieron y solo con el pasaporte y nada más. Así que, si alguien tiene pensado venirse a Londres, paciencia que todo se arregla. Y sobre lo segundo, tengo que llamar y pedir cita...como decía, paciencia.

Una semana ya, madre mía como pasa el tiempo. Y más aún cuando te lo pasas bien y con buena gente a tu lado. Volveré a repetir la palabra suerte porque es la que mejor me describe en estos últimos días. Y lo recalco porque no todo el mundo tiene a gente esperándolo a su llegada, como tuve yo con mi amigo Toni. O también haciendo amistades con Omar, un chico de Las Palmas con mi misma situación y que gracias a él he empezado a situarme en esta ciudad; o con Dawid, un chico polaco que coincidí con él en el hostal y que fuimos a los museos de Ciencia y Naturaleza; o a Pau, tocayo, de mi mismo pueblo y ahora mi amigo y compañero de curro.... mis compañeros de piso como de curro...digamos que he empezado con buen pie y espero seguir así por mucho tiempo más. Eso significa que me añoro poco y que aunque tenga mi super bandera de Menorca colgada en una pared de mi habitación, por ahora, no me veréis el pelo por allí.

Ahh y sobre mi inglés...voy haciendo. I'm getting better, thank you :)

Cheers!


1 comentario: